El impacto de la invasión rusa en el mundo es evidentemente asimétrico. Hay países más y menos afectados e, incluso, algunos en los que creció la actividad económica.
Por Mariano Capellino
El impacto de la invasión rusa en el mundo es evidentemente asimétrico. Hay países más y menos afectados e, incluso, en lo que a actividad económica se refiere, sectores específicos dentro de algunos países se ven beneficiados. Tal es el caso de la inversión en Real Estate en España.
Claro que no es una situación fortuita ni se dio de la noche a la mañana, sino que la coyuntura termina de afianzar un proceso de recuperación que lleva ya algunos años y vuelve este mercado el más atractivo para familias que quieran resguardar e incrementar su capital.
Este proceso se puede resumir en 10 claras variables.
1- La economía española se ha visto muy castigada por Covid-19. En el año 2020, el PIB se contrajo en torno al 12%, la desocupación creció en un 7,5% y esta realidad se tradujo en la duplicación del promedio de corrección de los países desarrollados.
2- El turismo, que representa el 15% del PBI, cayó en 2020 en un 70%. Esto ha generado una tasa de desempleo aún mayor, llevando a muchas pequeñas y medianas empresas a concurso de acreedores. Pero hoy, tras la invasión a Ucrania, España vuelve a posicionarse como un destino turístico más seguro que generará una importante cantidad de empleo y consumo.
3- Una gran cantidad de pequeñas y medianas empresas e inversores se vieron obligados a liquidar sus activos para salvar a sus empresas, e incluso algunos fueron o están siendo ejecutados por los bancos. Esta enorme baja de actividad en el sector de hotelería, retail y oficinas, ofrece una gran oportunidad frente a la considerable caída en los valores de los inmuebles donde se desarrollaban esas actividades. El endeudamiento privado es bajo, lo mismo que las tasas y el nivel de stock. Pero la demanda es fuerte y subieron el costo de construcción y la inflación. Todo este panorama se traduce en volatilidad del mercado financiero y en una renta fija cercana a 0, ambas variables están operando como impulsores de la demanda de bienes reales.
4- La conjunción de bajas tasas de interés en Europa con el exceso de liquidez existente en el mundo, convirtieron al Real Estate nuevamente en el activo más rentable y seguro del mundo en un nuevo ciclo de oportunidad. Más aún en una plaza como la española, que por lo antedicho, es un tesoro de oportunidades.
5- La renta en Real Estate pasó del 1.5 a 3 de factor de multiplicación de retornos frente a la renta fija europea. La sustitución de inversión financiera por la inmobiliaria oficia una ventana de oportunidad y la recuperación en España es más corta que en otras crisis.
6- Según los análisis de los principales fondos de inversión de Real Estate que invierten en España, se pronostica un volumen de inversión de 30.000 millones de euros a desarrollarse en 18 meses, de los cuales solamente han transcurrido 2 con muy buenos índices que ratifican la tendencia y anuncian la duplicación de los récords recientes de inversión. La lectura de la realidad nos indica que muy probablemente no subirán las tasas en Europa. El euro se deprecia y esto es bueno para impulsar la ya buena posición de España, pues la torna más competitiva para atraer turismo e inversión extranjera.
7- Hace exactamente un año, el segundo fondo más importante del mundo de Real Estate -Blackstone- captó 9.800 millones de euros para formar el mayor fondo de capital privado del mundo desde la aparición de la pandemia y lo destinó al Real Estate en Europa, principalmente en España.
8- Warren Buffett adquirió la agencia VA Property en España, con la que busca entrar en el mercado comercial: hotelero, oficinas, retail y logístico, complementando su inversión sobre el mercado residencial, que ya había realizado unos años antes.
9- Una reciente encuesta realizada a extranjeros de 44 países por Knight Frank, posiciona a España como el segundo país -luego del Reino Unido- más atractivo para reubicarse luego de la crisis del coronavirus. Esta tendencia se ha profundizado luego de la crisis bélica. Lejanía, clima, calidad de vida sanitaria y educativa, una moneda estable, accesibilidad, posibilidad de adquirir una segunda residencia, oportunidades comerciales, seguridad en el resguardo patrimonial y las perspectivas de pronta recuperación vuelven a España un destino de vivienda ideal.
10- Analizando las métricas de diversos mercados, frente a otros desarrollados de Europa y a USA (mercado residencial un 55% y comercial un 52% por encima de la burbuja del 2008), se desprende España ofreciendo refugio de valor y precios atractivos, (mercado residencial aún 30% debajo del 2008), ante la incertidumbre del mercado financiero y la fuerte inflación. Estos rebotes de inflación (que en España, durante febrero se situó en su nivel más alto desde 1989: 7,4%) se verán sin dudas, reflejados en los precios finales del comprador. A mayor inflación, el invertir en activos reales se presenta como la respuesta.
Los expertos en inversiones globales de Real Estate vemos en España una gran oportunidad para incrementar el capital en los próximos años, atentos a una coyuntura compleja y desafiante.